EL
LEÓN
El león es un felino
carnívoro de gran tamaño.
Como todos los felinos, los
leones son cuadrúpedos y mamíferos. Poseen una cola larga, un pelaje corto y
amarillento, así como una melena rubia u oscura alrededor del cuello en el caso
de los machos. De dieta exclusivamente carnívora, son feroces cazadores,
capaces de sujetar a la presa con sus garras y de rasgar grandes porciones de
carne con sus afilados colmillos.
Son junto a los tigres los
felinos más grandes que existen: pueden medir unos 2 a 3 metros (machos) o 1,80
a 2,7 metros (hembras) de longitud, y alcanzando un peso de 160 a 260 kg
(machos) o 120 a 182 kg (hembras).
Por otro lado, su
temperamento es más bien dormilón: dedican unas 20 horas diarias al descanso y
la inactividad, teniendo en cambio sus períodos de socialización al ocaso y sus
horas de cacería, por lo general, durante la noche. Dedican unas dos horas
diarias a caminar y unos 50 minutos diarios a comer.
Los leones, al contrario del
resto de los felinos, son criaturas bastante sociables, que suelen conformar
manadas. Tradicionalmente se juntan hembras con algún vínculo familiar y un
número menor de machos, junto a las crías de las primeras.
Es común verlos darse afecto
mediante lamidas y restregones, así como marcar su territorio mediante la orina
y mediante la presencia intimidatoria del macho dominante y sus feroces
rugidos.